¿Sabes qué muy poca gente conoce la ginebra de naranja? Posiblemente te digan que han tomado gin tonics con rodajas de esta fruta (desecadas probablemente), las cuales le dan un toque cítrico casi imperceptible, pero poco más. Así que ya va siendo hora de que descubran la frescura que aporta el sabor naranja a nuestros cócteles.
¿Y cómo descubrir a tus amigos la ginebra de naranja? Aquí va una idea: propón el reto de adivinar qué están bebiendo. Seguramente cuando se lo descubras, se sorprenderán. Te cuento cómo puedes hacerlo…
Reto de la Ginebra de Naranja
Paso 1
Invita a quien quieras que disfrute de una buena copa. Si no han probado nunca una ginebra de naranja, mucho mejor.
Paso 2
Hazte con una botella de Emma Orange Gin, la mejor ginebra de naranja del mercado.
Paso 3
Asegúrate de que tienes todo lo necesario para preparar el gin tonic perfecto. Así el reto además de ser divertido se convertirá en insuperable. Ya sabes: una buena tónica, los hielos, las copas… y claro está, los botánicos. En este caso, la cáscara de naranja potenciará aún más el sabor de la Emma Premium Gin.
Paso 4
Prepara algo de comer que maride perfectamente con el gin tonic de naranja. Una buena opción son unos bombones de chocolate negro para los que amen el dulce o unos anacardos para los que suelan decantarse por lo salado.
Paso 5
Tapa los ojos de tus amigos y dales a probar la ginebra de naranja sin decirles que van a probar un gin tonic. Pregúntales a qué les sabe y qué piensan que están bebiendo. Si lo adivinan, déjales que se quiten el pañuelo o antifaz con el que les hayas ocultado la copa… si es que quieren, claro está.
Paso 6
Te aconsejo que tengas otras bebidas y, por qué no, tanto Emma Lime Gin como Emma Strawberry Gin. Así podrán probar cada uno de los sabores de estas ginebras Premium.
Paso 7
Disfruta de una maravillosa velada. A fin de cuentas, no hay mejor rato que el que pasas con la gente que quieres.
¡Feliz reto de la ginebra de naranja!
Con el calor abofeteándonos cada vez que se nos ocurre pisar la calle solo nos apetece una cosa: refrescarnos. Y si ya han cerrado la piscina (o simplemente no tenemos, como me pasa a mí) y es hora de prepararse una buena copa para pasar la tarde-noche, solo nos vienen a la cabeza cócteles refrescantes. En nuestra cabeza se dibujan enormes copas de balón, hielos que crujen al contacto con el líquido, colores apetecibles… ¿Colores? Sí, porque estoy pensando para vosotros en una velada muy rosa (y fresquita con ginebra de fresa).
Cócteles con Ginebra de Fresa
Seguramente lo habéis adivinado desde el título. La protagonista de este post es la Emma Strawberry Gin, una ginebra que nos va a dar dulzura y frescor para despedir al sol abrasador como se merece. Pero esta vez voy a ir más allá de preparar un gin tonic perfecto acompañado por unas exquisitas láminas de fresa; es más, tampoco os voy a contar cómo preparar el cóctel del verano. Esta vez nos vamos a sumergir en un mundo de fresas. Y lo vamos a hacer con dos recetas similares, aunque cada una de ellas con personalidad propia.
Cóctel 1
En primer lugar, apuntad los ingredientes:
- 45 ml. de Emma Strawberry Gin
- 250 gramos de fresa
- 2 cucharadas pequeñas de azúcar
- 2 hojas de albahaca
- 2 cucharadas de zumo de limón fresquito
- Hielo
- Agua mineral fría
Y a continuación, vamos al modo de preparación. Cogemos la coctelera y colocamos dentro las fresas, el azúcar y las hojas de albahaca con el objetivo de macerarlo todo bien. Echamos la mitad del hielo y después nuestra Emma Strawberry Gin y el zumo de limón. Tapamos la coctelera para agitar todo (si la dejamos abierta, se nos saldrá, obviamente). Cuando notemos que todo está bien frío, echamos el resultado en un vaso con un poco de agua mineral fría y el hielo restante. Y ya está. A pasar una tarde de verano refrescante con nuestro cóctel con ginebra de fresa.
Cóctel 2
Empezamos con los ingredientes:
- 75 ml. de Emma Strawberry Gin
- 125 gramos de fresas muy maduras
- 1 cucharita de azúcar
- 2 cucharadas pequeñas de vermut blanco seco
- Hielo
- Media naranja
Para preparar este segundo cóctel se pican dos fresas y se ponen en la copa. Posteriormente se añade el vermut y dejamos reposar el resultado una hora en la nevera (ya sabéis, tiene que ser todo muy refrescante). Pasado ese tiempo batimos el resto de las fresas con azúcar, ginebra y hielo, hasta que éste se deshaga. Finalmente unimos lo batido a la copa de la nevera. Y con el objetivo de darle un toque de color, cortamos la naranja para poner un trozo en el interior del cóctel.
A pesar de que no soy la persona más friki del mundo, el otro día vi en la tele una escena de El Señor de los Anillos en la que Gandalf le decía a sus compañeros: “Corred insensatos”. Y a la cabeza me vino esa frase poco después, justo cuando observaba preparar un gin tonic en un lugar que no mencionaré.
“Corred, insensatos”, quise gritar al presenciar como, uno a uno, iban cometiendo los errores más típicos; esos que son capaces de cargarse el combinado y, por lo tanto, nuestro placer al degustarlo. Y os preguntaréis, ¿cuáles son dichos errores? Tranquilos, pues os los resumiré en los siguientes puntos.
Errores al preparar un gin tonic
1. Too much gin. Sabemos que nos encanta la ginebra (si no, no pediríamos un gin tonic), pero pasarnos con la cantidad que echamos puede hacer que todo se vaya al traste. No debe pasar de 5 o 7 cl., es decir, de un vaso de chupito. Si ponemos más, el sabor deja de ser tan agradable.
2. Hielos pequeños que se derritan rápido. Si es importante que el gin tonic no sepa demasiado a alcohol, no lo es menos impedir que se agüe y pierda sabor. Y eso es lo que ocurre si no utilizamos hielos gordos (si es posible, comprados).
3. ¿Un vaso de tubo? ¡Apártalo de mi vista! Solo con una copa o, en su defecto, un vaso ancho, se nos va a hacer la boca agua; primero viéndolo y después captando su aroma. De ese modo, el sabor se potenciará y los disfrutaremos a tope.
4. Echar la tónica «a lo loco”. Sí, amigos, no hay que tirarla bruscamente sobre la ginebra, sino que hay que cuidar su gas para que la mezcla sea perfecta. Así no tendremos que estar removiendo a loco.
5. No utilizar Emma Premium Gin. ¿Es que acaso hay ginebras de sabores más ricas que las ginebras de fresa, lima y naranja de Emma? La respuesta es NO. Por eso, sería un error no disfrutar de la dulzura de Emma Strawberry Gin, la acidez de Emma Lime Gin y la frescura de Emma Orange Gin.
¿Todavía no sabéis cuál es el cóctel más de moda este verano? Os lo cuento hoy en mi post del blog. ¡Es muy fácil de hacer y está riquísimo! Obviamente, seguro que sabéis el ingrediente secreto, mis ginebras favoritas de Emma Premium Gin.
Realmente os voy a contar tres recetas en una, porque podéis elegir el cóctel del verano en vuestro sabor favorito: lima, fresa o naranja. Ahora, vamos al grano, esto es lo que necesitáis:
- Un vaso ancho, como el de los mojitos.
- Un medidor de bebidas
- Un removedor o agitador
- Mortero
- Hielo picado
- Fruta depende del sabor del cóctel: fresas, limas o naranjas.
- Tónica
- Emma Premium Gin (de tu sabor preferido)
Primero debes poner en el fondo del vaso la fruta (lima, naranja o fresa) y picarla con el mortero. En el caso de la naranja o la lima, si no te gusta el sabor amargo, deber pelar antes la fruta y así solo conservará el ácido.
Una vez que ya se exprima el sabor de la fruta, sirve 5cl de ginebra Emma Premium Gin y rellena el vaso con hielo picado hasta casi rozar el comienzo del vaso. Vierte 20cl de tónica y remueve todo con el agitador.
Para finalizar, vuelve a echar tónica hasta que casi rebose el vaso, pon una pieza de fruta para decorar en el cristal y una pajita para beber.
C’est fini! ¡Ya tenéis un cóctel más que refrescante para el verano! ¿Y vosotros? ¿Cómo haríais un cóctel con Emma Premium Gin? Dejadme vuestras ideas en los comentarios y haré un post con los mejores cócteles que me hagáis llegar al final del verano. También podéis hacer vuestros cócteles, etiquetarme en las redes sociales y con el #CóctelConEmma encontraré todas vuestras mezclas para disfrutar de mi bebida favorita.
¡Hasta la próxima! ¡Un beso fuerte!
Con las vacaciones apetece un montón hacer planes diferentes, ya sea en la playa o en la montaña, está muy chulo poder hacer pic-nic con la familia o los amigos. A mí me encanta llevar la típica cesta con mantel de cuadros incluido, aunque para triunfar realmente en un pic-nic necesitas mucho más que el típico postureo.
En las películas, por ejemplo, siempre aparecen platos de barro o de cristal para hacer un pic-nic. Es mucho más cómodo llevar vasos, platos y cubiertos de plástico. Eso sí, luego lávalos para reutilizarlos. ¡El plástico contamina un montón!
Depende si vas a la playa o a la montaña debes elegir un outfit distinto, pero lo que nunca puede faltar es la crema de sol por todo el cuerpo y guardada en el bolso para volver a echarla y una gorra o sombrero para cubrir la cabeza del sol. Aunque elijas ponerte a la sombra seguro que hay momentos en los que te expones al sol y hay que proteger el coco.
Respecto a la bebida, obviamente es necesaria una neverita portátil, ya que ahora en verano triunfan las bebidas frías tanto para acompañar la comida como para compartir con el postre. Como ya sabréis, yo nunca me olvido de llevar mis tres botellas favoritas de Emma Premium Gin, y para triunfar más todavía, guardo frutas de lima, naranja y fresa para acompañar la bebida. ¡Ah! Y mucho mucho hielo. Por otro lado, para tomar mientras comes puedes llevar refrigerios varios, tinto de verano, cerveza… ¡Todo muy fresquito!
Por último, y quizá lo más importante… ¡La comida! Elige siempre platos que sean fáciles de llevar en tuppers y que no se estropeen con el calor. Puedes hacer una empanada, llevar embutido, ensalada campera (sin mayonesa que en verano es un peligro), tomates aliñados, latas de conservas, aceitunas, patatas… Muchas cosas de picoteo para compartir con todo el mundo. ¡Eso es lo guay de los pic-nics!
Y vosotros, ¿qué os llevaríais a un pic-nic?
¡Hola a todos! ¿Qué tal? Yo súper feliz porque está en Madrid el World Pride 2017 y estamos todos los amigos en la capital. Ya sabéis lo que dice el eslogan que decora la ciudad: “Ames a quién ames, Madrid te quiere”. Por eso, todos mis amigos, sean gays, lesbianas, hetero, trans, bi… han querido venirse de fiesta a la capital… ¡Qué está llena de colores!
Lo guay es que –como ya sabéis- siempre tengo botellas de Emma Premium Gin en mi apartamento, y como son de colores… ¡Pegan un montón con el momento! Las copas de antes de salir las estamos haciendo en mi casa y todos haciéndose fotos “orgullosos” con las botellas, porque además Emma Premium Gin también ha lanzado su apoyo al colectivo LGTBI+ en sus redes sociales. ¿Ya les seguís verdad?
Lo cierto es que a mí los colores de la bandera me encantan, pero también lo que significan estas fiestas. No son solo una celebración por los derechos conseguidos, también un recordatorio por los que quedan por lograr. Además, obviamente, son unas de las mejores fiestas de Madrid, en las que no importa cuál sea tu identidad o condición sexual… ¡Todos lo pasamos fenomenal!
¿Os cuento una curiosidad sobre los colores de la bandera del Orgullo? Fue creada por Gilbert Baker en 1978 y cada color tiene un significado. El rosa representa el sexo, el rojo la vida, el naranja la curación, el amarillo la luz del sol, el verde la naturaleza, el azul el arte, el celeste la armonía y por último el violeta, el espíritu humano.
¿Qué os parece? ¿Vosotros habéis ido al World Pride 2017? Y vuestras botellas de Emma Premium Gin, ¿triunfan tanto como las mías?
¡Un beso a todos!
Amigos y amigas, el otro día me quede gratamente sorprendida cuando en una de mis incursiones en el mundo de la ginebra me enteré de que tomarla aporta cosas buenas a mi cuerpo. “Espera, espera, ¿me estáis diciendo que es buena para la salud?”, pregunté alucinada. Y la respuesta fue un rotundo sí… siempre que sea en una cantidad moderada, por supuesto. Y como ya os he ilustrado sobre el modo de hacer un gin tonic perfecto y con qué acompañar cada tipo de ginebra, pues hoy me toca contaros los beneficios de la ginebra cuando os tomáis una buena copa. Apuntad y, si queréis, al acabar brindamos a nuestra salud.
Beneficios de la ginebra (bebida con moderación)
Es digestiva. Así es, un buen gin tonic facilita la digestión, haciendo que desaparezca esa sensación de pesadez que tenemos cuando nos atiborramos a comer. Vamos, que una copita en la sobremesa puede venir perfectamente para ayudar a nuestro estómago a digerir.
Es baja en calorías. Aunque se trate de una bebida alcohólica, tiene muchas menos calorías que otras (¡perfecto para la operación biquini!). Eso sí, evitad mezclarla con bebidas que contengan mucho azúcar, ya que éste combinado con el alcohol multiplica las malditas calorías.
Tiene propiedades diuréticas. La ginebra estimula el drenaje de los riñones, con lo que es buena para evitar las infecciones urinarias. Pero recordad que para que esto sea posible, debéis beber mucha agua también. Es la combinación de ambos líquidos lo que aporta el efecto beneficioso.
Propiedades medicinales. Como bien sabéis, tanto la ginebra como la tónica se tomaban en un principio como medicamentos y, claro está, esas propiedades no han desaparecido –aunque haya que relativizarlo–. Pero bueno, yo os cuento que entre los beneficios de la ginebra se encuentran su efecto antiinflamatorio (gracias al enebro) y su capacidad antiséptica y antiespasmódica (mejora el aparato respiratorio). Como es evidente, nos os vayáis a poner hasta las cejas de ginebra si no os encontráis bien, pero eso no quita que os venga bien tomar algún trago.
Es divertida. Quizás el mejor de todos los beneficios de la ginebra es que su maravilloso sabor y las posibles combinaciones que ofrece provocan un montón de momentos divertidos con amigos. Porque, ¿acaso irse a tomar unos gin tonics no es sinónimo de alegría y diversión?
¡Pues eso, a disfrutar de una buena ginebra y a brindar por sus beneficios!
El otro día quería disfrutar de una bonita velada con mis mejores amigos, y aunque es tiempo para salir de terraceo, me apetecía invitarlos a casa y prepararles el gin tonic perfecto. Además, así podía mostrar mis conocimientos sobre los mejores aperitivos para maridar las diferentes ginebras.
Emma, ¿cómo preparas el gin tonic perfecto?
Esa es la pregunta que me hicieron todos cuando se lo propuse; a fin de cuentas se están convirtiendo en auténticos gin lovers y cada vez es más complicado sorprenderlos. Afortunadamente, conozco los pasos para hacerlo y todos terminaron más que satisfechos. ¿Que cuáles son esos pasos? Os los cuento.
Lo primero es escoger una buena copa ancha, tipo balón, nada de vasos de tubo, pues no disfrutamos de todos los aromas y además calentamos el gin tonic con nuestra mano. En los garitos los suelen utilizar porque se guardan y lavan con mucha facilidad, pero cada vez son más los clientes que piden un “recipiente” como es debido.
En segundo lugar, ese día bajé a por una bolsa de hielos, ya que el que se hace en casa se deshace con rapidez y la copa se “agua” en pocos minutos, perdiendo toda la esencia.
Las ginebras
Y llegó el momento de elegir la ginebra. Como conozco bien los paladares de mis amigos, me acerqué a El Corte Inglés y compré las tres modalidades de Emma Premium Gin: la refrescante Lime Gin, la elegante Orange Gin y la suave y dulce Strawberry Gin; diferentes perfiles para que los invitados tuvieran diversas posibilidades y pasaran la mejor velada. ¡Que soy una excelente anfitriona!
Así que tenía las copas de balón, el hielo y las ginebras. ¿Cuánta hay que echar para el gin tonic perfecto? Pues no hay que ser ansiosos, demasiada cantidad aumentará el sabor a alcohol y puede estar demasiado fuerte. Lo mejor es que para cada botellín de 20 cl de tónica, le pongamos unos 5 cl de ginebra (un vaso de chupito).
Las tónicas
Respecto a las tónicas, ahora hay muchas variedades en el mercado. Si queremos dotar de mayor importancia al aroma de la ginebra, lo mejor será utilizar alguna modalidad que no sea demasiado aromatizada. Aunque también podemos optar por las que sí lo son para fortalecer aún más el tono afrutado de las Emma Premium Gin. Yo no me compliqué; al servir mis gin tonics perfectos preguntaba a mis amigos qué opción preferían. Ah, recuerda que la tónica debe estar fría, así que métela en el frigo bastante tiempo antes de la quedada.
¿Estás esperando el momento de la cuchara mezcladora? Mis colegas también. Sí, tengo una y no es una bobada; con ella la mezcla es más sencilla y no te cargas las burbujas cuando te pones a remover después. Eso sí, en caso de que no tengas, puedes dejar caer la ginebra sobre los hielos lentamente.
Los botánicos
Y llega el toque final: cuando iba a aromatizarlo, tampoco me crecí echándole demasiada parafernalia al combinado. Alguna fresa para Emma Strawberry, cáscara de lima para Emma Lime y cáscara de naranja para Emma Orange. Los botánicos (que es como se llama esto que le echamos) deben aportar sabor, no matarlo, ni esconderlo.
Y así, amigos míos, el gin tonic perfecto hizo posible la velada perfecta.
¡Muy buenas! ¿Qué tal? Esta semana estoy muy nerviosa deseando que llegue el jueves, ya que me han invitado al evento de Linda Sharkey en Madrid, y tengo muchísimas ganas de ir.
Este jueves 6 de abril se presenta el trunck show #Linda4Perinola, en el que se mostrará en exclusiva la colaboración que ha hecho Linda Sharkey para la marca Perinola HG. Desde las 9:00 hasta las 20:00 se podrá acudir a este espacio en la Calle Guzmán el Bueno 127 para conocer esta nueva colección y pasar un rato divertido.
Por la mañana se podrá disfrutar de un brunch and bubbles y por la tarde llega el mejor momento, los canapés y los gin tonics. Además, ¿sabéis cuál es la marca que va a estar en el evento? ¡Emma Premium Gin! Sí, la ginebra que lleva mi nombre estará presente para degustarla este próximo jueves. Una razón más para no perdérmelo.
Para los que no conozcáis Emma Premium Gin, es una ginebra riquísima en realidad son tres, porque puedes elegir entre tres sabores: fresa, naranja y lima.
¡Nos vemos este jueves!
Sí, antes de llegar a la ciudad ya seguía a algunos ilustradores en las redes sociales y también me compré varios de sus libros. Muchos de ellos envían mensajes positivos como Mr. Wonderful que te ayudan a seguir adelante día a día o también más realistas como Alfonso Casas que reflejan la realidad más dura del amor y otras vivencias.
Tengo que confesar que antes de llegar a la ciudad me pillé todos los libros en los que ha participado Moderna de Pueblo como ilustradora, y es que Raquel Córcoles ha sido mi referente antes de tomar cualquier decisión. Me siento tan identificada con sus ilustraciones que a veces hasta me creo que están hechas para mí.
Las escenas que representa de chicas en sus dibujos me fascinan, porque parece que nos hagan una fotografía a mis amigas a mí mientras tomamos una copa de Emma Premium Gin en casa o vamos al bar a tomar unas copas. Es totalmente nosotras.
“Soy de pueblo: manual para sobrevivir en la ciudad” es un libro de Raquel Córcoles que se ha convertido para mí en una hoja de ruta. Cada vez que dudo en algo, intento tomármelo con humor con sus ilustraciones y fácilmente encuentro la solución.
Una ilustración totalmente distinta pero que me fascina es la de Paula Bonet, sus dibujos son lo más emocional que he visto en mi vida. En mi cuarto tengo una lámina que ella misma me envió (escrita mi dirección de su puño y letra) y que pienso llevarme a tantos pisos como me mude el resto de mi vida. Es simplemente perfecta.
Sara Herranz es otra ilustradora que me gusta mucho, pero más para momento de drama, ya que ella está más enfocada al desamor y a la supervivencia en este tipo de situaciones. Eso sí, sus dibujos en blanco y negro con tonalidades rojas en los labios o las mejillas son realmente inspiradores. Con un estilo propio muy pero que muy personal.
El libro de Lucía Be (que ya ha montado su propia tienda online con diferentes secciones) de “La vida es una verbena” me chifó en su momento, y cada vez que sube una ilustración a las redes sociales me emociona, porque creo que tendría que abrir una cuenta exclusivamente para sus ilustraciones. Me encantan.
Por último, no podía olvidarme de Pedrita Parker, la ilustradora que nos muestra a las mujeres como superheroínas. Y es que en su calendario de 2017 ha representado a algunas de las mujeres más empoderadas del cine. Está muy pero que muy chulo. Os lo recomiendo.