Con el calor abofeteándonos cada vez que se nos ocurre pisar la calle solo nos apetece una cosa: refrescarnos. Y si ya han cerrado la piscina (o simplemente no tenemos, como me pasa a mí) y es hora de prepararse una buena copa para pasar la tarde-noche, solo nos vienen a la cabeza cócteles refrescantes. En nuestra cabeza se dibujan enormes copas de balón, hielos que crujen al contacto con el líquido, colores apetecibles… ¿Colores? Sí, porque estoy pensando para vosotros en una velada muy rosa (y fresquita con ginebra de fresa).
Cócteles con Ginebra de Fresa
Seguramente lo habéis adivinado desde el título. La protagonista de este post es la Emma Strawberry Gin, una ginebra que nos va a dar dulzura y frescor para despedir al sol abrasador como se merece. Pero esta vez voy a ir más allá de preparar un gin tonic perfecto acompañado por unas exquisitas láminas de fresa; es más, tampoco os voy a contar cómo preparar el cóctel del verano. Esta vez nos vamos a sumergir en un mundo de fresas. Y lo vamos a hacer con dos recetas similares, aunque cada una de ellas con personalidad propia.
Cóctel 1
En primer lugar, apuntad los ingredientes:
- 45 ml. de Emma Strawberry Gin
- 250 gramos de fresa
- 2 cucharadas pequeñas de azúcar
- 2 hojas de albahaca
- 2 cucharadas de zumo de limón fresquito
- Hielo
- Agua mineral fría
Y a continuación, vamos al modo de preparación. Cogemos la coctelera y colocamos dentro las fresas, el azúcar y las hojas de albahaca con el objetivo de macerarlo todo bien. Echamos la mitad del hielo y después nuestra Emma Strawberry Gin y el zumo de limón. Tapamos la coctelera para agitar todo (si la dejamos abierta, se nos saldrá, obviamente). Cuando notemos que todo está bien frío, echamos el resultado en un vaso con un poco de agua mineral fría y el hielo restante. Y ya está. A pasar una tarde de verano refrescante con nuestro cóctel con ginebra de fresa.
Cóctel 2
Empezamos con los ingredientes:
- 75 ml. de Emma Strawberry Gin
- 125 gramos de fresas muy maduras
- 1 cucharita de azúcar
- 2 cucharadas pequeñas de vermut blanco seco
- Hielo
- Media naranja
Para preparar este segundo cóctel se pican dos fresas y se ponen en la copa. Posteriormente se añade el vermut y dejamos reposar el resultado una hora en la nevera (ya sabéis, tiene que ser todo muy refrescante). Pasado ese tiempo batimos el resto de las fresas con azúcar, ginebra y hielo, hasta que éste se deshaga. Finalmente unimos lo batido a la copa de la nevera. Y con el objetivo de darle un toque de color, cortamos la naranja para poner un trozo en el interior del cóctel.
A pesar de que no soy la persona más friki del mundo, el otro día vi en la tele una escena de El Señor de los Anillos en la que Gandalf le decía a sus compañeros: “Corred insensatos”. Y a la cabeza me vino esa frase poco después, justo cuando observaba preparar un gin tonic en un lugar que no mencionaré.
“Corred, insensatos”, quise gritar al presenciar como, uno a uno, iban cometiendo los errores más típicos; esos que son capaces de cargarse el combinado y, por lo tanto, nuestro placer al degustarlo. Y os preguntaréis, ¿cuáles son dichos errores? Tranquilos, pues os los resumiré en los siguientes puntos.
Errores al preparar un gin tonic
1. Too much gin. Sabemos que nos encanta la ginebra (si no, no pediríamos un gin tonic), pero pasarnos con la cantidad que echamos puede hacer que todo se vaya al traste. No debe pasar de 5 o 7 cl., es decir, de un vaso de chupito. Si ponemos más, el sabor deja de ser tan agradable.
2. Hielos pequeños que se derritan rápido. Si es importante que el gin tonic no sepa demasiado a alcohol, no lo es menos impedir que se agüe y pierda sabor. Y eso es lo que ocurre si no utilizamos hielos gordos (si es posible, comprados).
3. ¿Un vaso de tubo? ¡Apártalo de mi vista! Solo con una copa o, en su defecto, un vaso ancho, se nos va a hacer la boca agua; primero viéndolo y después captando su aroma. De ese modo, el sabor se potenciará y los disfrutaremos a tope.
4. Echar la tónica «a lo loco”. Sí, amigos, no hay que tirarla bruscamente sobre la ginebra, sino que hay que cuidar su gas para que la mezcla sea perfecta. Así no tendremos que estar removiendo a loco.
5. No utilizar Emma Premium Gin. ¿Es que acaso hay ginebras de sabores más ricas que las ginebras de fresa, lima y naranja de Emma? La respuesta es NO. Por eso, sería un error no disfrutar de la dulzura de Emma Strawberry Gin, la acidez de Emma Lime Gin y la frescura de Emma Orange Gin.
¿Todavía no sabéis cuál es el cóctel más de moda este verano? Os lo cuento hoy en mi post del blog. ¡Es muy fácil de hacer y está riquísimo! Obviamente, seguro que sabéis el ingrediente secreto, mis ginebras favoritas de Emma Premium Gin.
Realmente os voy a contar tres recetas en una, porque podéis elegir el cóctel del verano en vuestro sabor favorito: lima, fresa o naranja. Ahora, vamos al grano, esto es lo que necesitáis:
- Un vaso ancho, como el de los mojitos.
- Un medidor de bebidas
- Un removedor o agitador
- Mortero
- Hielo picado
- Fruta depende del sabor del cóctel: fresas, limas o naranjas.
- Tónica
- Emma Premium Gin (de tu sabor preferido)
Primero debes poner en el fondo del vaso la fruta (lima, naranja o fresa) y picarla con el mortero. En el caso de la naranja o la lima, si no te gusta el sabor amargo, deber pelar antes la fruta y así solo conservará el ácido.
Una vez que ya se exprima el sabor de la fruta, sirve 5cl de ginebra Emma Premium Gin y rellena el vaso con hielo picado hasta casi rozar el comienzo del vaso. Vierte 20cl de tónica y remueve todo con el agitador.
Para finalizar, vuelve a echar tónica hasta que casi rebose el vaso, pon una pieza de fruta para decorar en el cristal y una pajita para beber.
C’est fini! ¡Ya tenéis un cóctel más que refrescante para el verano! ¿Y vosotros? ¿Cómo haríais un cóctel con Emma Premium Gin? Dejadme vuestras ideas en los comentarios y haré un post con los mejores cócteles que me hagáis llegar al final del verano. También podéis hacer vuestros cócteles, etiquetarme en las redes sociales y con el #CóctelConEmma encontraré todas vuestras mezclas para disfrutar de mi bebida favorita.
¡Hasta la próxima! ¡Un beso fuerte!
Con las vacaciones apetece un montón hacer planes diferentes, ya sea en la playa o en la montaña, está muy chulo poder hacer pic-nic con la familia o los amigos. A mí me encanta llevar la típica cesta con mantel de cuadros incluido, aunque para triunfar realmente en un pic-nic necesitas mucho más que el típico postureo.
En las películas, por ejemplo, siempre aparecen platos de barro o de cristal para hacer un pic-nic. Es mucho más cómodo llevar vasos, platos y cubiertos de plástico. Eso sí, luego lávalos para reutilizarlos. ¡El plástico contamina un montón!
Depende si vas a la playa o a la montaña debes elegir un outfit distinto, pero lo que nunca puede faltar es la crema de sol por todo el cuerpo y guardada en el bolso para volver a echarla y una gorra o sombrero para cubrir la cabeza del sol. Aunque elijas ponerte a la sombra seguro que hay momentos en los que te expones al sol y hay que proteger el coco.
Respecto a la bebida, obviamente es necesaria una neverita portátil, ya que ahora en verano triunfan las bebidas frías tanto para acompañar la comida como para compartir con el postre. Como ya sabréis, yo nunca me olvido de llevar mis tres botellas favoritas de Emma Premium Gin, y para triunfar más todavía, guardo frutas de lima, naranja y fresa para acompañar la bebida. ¡Ah! Y mucho mucho hielo. Por otro lado, para tomar mientras comes puedes llevar refrigerios varios, tinto de verano, cerveza… ¡Todo muy fresquito!
Por último, y quizá lo más importante… ¡La comida! Elige siempre platos que sean fáciles de llevar en tuppers y que no se estropeen con el calor. Puedes hacer una empanada, llevar embutido, ensalada campera (sin mayonesa que en verano es un peligro), tomates aliñados, latas de conservas, aceitunas, patatas… Muchas cosas de picoteo para compartir con todo el mundo. ¡Eso es lo guay de los pic-nics!
Y vosotros, ¿qué os llevaríais a un pic-nic?
¡Hola a todos! ¿Qué tal? Yo súper feliz porque está en Madrid el World Pride 2017 y estamos todos los amigos en la capital. Ya sabéis lo que dice el eslogan que decora la ciudad: “Ames a quién ames, Madrid te quiere”. Por eso, todos mis amigos, sean gays, lesbianas, hetero, trans, bi… han querido venirse de fiesta a la capital… ¡Qué está llena de colores!
Lo guay es que –como ya sabéis- siempre tengo botellas de Emma Premium Gin en mi apartamento, y como son de colores… ¡Pegan un montón con el momento! Las copas de antes de salir las estamos haciendo en mi casa y todos haciéndose fotos “orgullosos” con las botellas, porque además Emma Premium Gin también ha lanzado su apoyo al colectivo LGTBI+ en sus redes sociales. ¿Ya les seguís verdad?
Lo cierto es que a mí los colores de la bandera me encantan, pero también lo que significan estas fiestas. No son solo una celebración por los derechos conseguidos, también un recordatorio por los que quedan por lograr. Además, obviamente, son unas de las mejores fiestas de Madrid, en las que no importa cuál sea tu identidad o condición sexual… ¡Todos lo pasamos fenomenal!
¿Os cuento una curiosidad sobre los colores de la bandera del Orgullo? Fue creada por Gilbert Baker en 1978 y cada color tiene un significado. El rosa representa el sexo, el rojo la vida, el naranja la curación, el amarillo la luz del sol, el verde la naturaleza, el azul el arte, el celeste la armonía y por último el violeta, el espíritu humano.
¿Qué os parece? ¿Vosotros habéis ido al World Pride 2017? Y vuestras botellas de Emma Premium Gin, ¿triunfan tanto como las mías?
¡Un beso a todos!
¡Hola de nuevo! ¿Qué tal? Yo muy feliz porque por fin llegó el verano.
Para mí es la mejor estación del año, y no, no por el calor horripilante que tenemos estos días. Me encanta porque es sinónimo de vacaciones y eso me hace muy feliz. Por fin puedo estar con mi familia, mis amigos, conocer lugares nuevos y volver a los que me recuerdan a mi niñez.
Ya tengo planeadas mis vacaciones aunque también habrá sorpresas, como todos los veranos. ¿Vosotros? ¿Sois de planear las vacaciones o vivirlas según vayan surgiendo? Lo cierto es que a mí me gusta mezclar ambas cosas, aunque me encantan las aventuras de última hora, también disfruto con los viajes programados y cerrados con antelación. Eso sí, este año a ninguno le faltará una cosa: mis ginebras favoritas de Emma Premium Gin.
Vaya donde vaya: la costa, la montaña, la ciudad… No faltarán en mi maleta los tres sabores (fresa, naranja y lima) de Emma. A mis amigos ya les encanta pero además, si conozco gente nueva, es genial poder invitarles a una copa con tu nombre.
Yo os recomiendo que si vais de viaje llevéis vuestra bebida favorita en la maleta, porque las noches de verano son muuuuuy largas… O también –como ya os he contado otras veces- podéis acercaros a El Corte Inglés más cercano en la ciudad española que estéis y comprar vuestras botellas de Emma Premium Gin.
Os cuento mis planes del verano, esperando a que vosotros me contéis en los comentarios los vuestros… ¡Si los tenéis, claro!
Primero me vuelvo a mi pueblo, a disfrutar de la familia y de mis amigos de la infancia. Obviamente me llevaré mis botellas de Emma Premium Gin en la maleta, me encanta compartir las noches de verano con los míos y junto a una copa de gin tonic, recordando viejos momentos.
Después de pasar unos días en “mi casa”, me voy con mis compañeras de trabajo (y amigas) a Ibiza. ¡Sí! ¡Es la primera vez que voy! ¡Estoy emocionada! Sé que lo daré todo en las discotecas de la isla, pero también quiero disfrutar de las mañanas en esas calas maravillosas que he visto en Google. Mis amigas y yo ya nos llevamos un cargamento de Emma Premium Gin, porque antes de salir siempre nos gusta tomar la primera en casa, y ¡qué mejor que con nuestra ginebra favorita!
Por último, tengo planeado ir a un par de festivales. ¡Me encanta la música! Aunque todavía no tengo nada definido, esos serán mis planes “sorpresa” aunque hay una cosa que no faltará tampoco en estos viajes. ¿Adivináis qué es?
¿Y vosotros? ¿Qué planes tenéis para este verano?
Amigos y amigas, el otro día me quede gratamente sorprendida cuando en una de mis incursiones en el mundo de la ginebra me enteré de que tomarla aporta cosas buenas a mi cuerpo. “Espera, espera, ¿me estáis diciendo que es buena para la salud?”, pregunté alucinada. Y la respuesta fue un rotundo sí… siempre que sea en una cantidad moderada, por supuesto. Y como ya os he ilustrado sobre el modo de hacer un gin tonic perfecto y con qué acompañar cada tipo de ginebra, pues hoy me toca contaros los beneficios de la ginebra cuando os tomáis una buena copa. Apuntad y, si queréis, al acabar brindamos a nuestra salud.
Beneficios de la ginebra (bebida con moderación)
Es digestiva. Así es, un buen gin tonic facilita la digestión, haciendo que desaparezca esa sensación de pesadez que tenemos cuando nos atiborramos a comer. Vamos, que una copita en la sobremesa puede venir perfectamente para ayudar a nuestro estómago a digerir.
Es baja en calorías. Aunque se trate de una bebida alcohólica, tiene muchas menos calorías que otras (¡perfecto para la operación biquini!). Eso sí, evitad mezclarla con bebidas que contengan mucho azúcar, ya que éste combinado con el alcohol multiplica las malditas calorías.
Tiene propiedades diuréticas. La ginebra estimula el drenaje de los riñones, con lo que es buena para evitar las infecciones urinarias. Pero recordad que para que esto sea posible, debéis beber mucha agua también. Es la combinación de ambos líquidos lo que aporta el efecto beneficioso.
Propiedades medicinales. Como bien sabéis, tanto la ginebra como la tónica se tomaban en un principio como medicamentos y, claro está, esas propiedades no han desaparecido –aunque haya que relativizarlo–. Pero bueno, yo os cuento que entre los beneficios de la ginebra se encuentran su efecto antiinflamatorio (gracias al enebro) y su capacidad antiséptica y antiespasmódica (mejora el aparato respiratorio). Como es evidente, nos os vayáis a poner hasta las cejas de ginebra si no os encontráis bien, pero eso no quita que os venga bien tomar algún trago.
Es divertida. Quizás el mejor de todos los beneficios de la ginebra es que su maravilloso sabor y las posibles combinaciones que ofrece provocan un montón de momentos divertidos con amigos. Porque, ¿acaso irse a tomar unos gin tonics no es sinónimo de alegría y diversión?
¡Pues eso, a disfrutar de una buena ginebra y a brindar por sus beneficios!
No hace falta deciros a estas alturas que soy una gin lover. Así que, como amante de la ginebra no solo he viajado por Europa buscando sus orígenes, sino que el otro día me apunté a una actividad que me ha venido muy bien: me enseñaron cómo maridar diferentes tipos de gin tonic, es decir, qué aperitivos casan mejor para cada ocasión. Y como imagino que deseáis saber lo que me contaron, aquí os hago un resumen.
Para un gin tonic con Lime Gin
El refrescante sabor de la ginebra de lima con tónica puede contrarrestarse con el toque ligeramente dulce y suave de las nueces de macadamia, que como sabéis, le aportan un toque gourmet al momento gin tonic que os va a encantar. Eso sí, si preferís un toque más salado que contraste con el dulzor de la lima, siempre está bien optar por snacks de queso.
Para un gin tonic con Orange Gin
La ginebra con sabor a naranja destaca por una elegancia y brillantez muy especial al paladar, de ahí que pueda combinarse con sabores muy dulces o salados. Entre los primeros, destacan las onzas de chocolate negro. Ya sabéis que la naranja y el cacao forman una pareja perfecta. Y si optáis por algo salado, hay varias opciones de frutos secos, pero para mí los anacardos son los mejores.
Para un gin tonic con Strawberry Gin
Y vamos con una de las favoritas de la gente: la suave y dulce ginebra de fresa, a cuyos gin tonics le van perfectos los frutos rojos. Vale, eso seguramente lo habéis visto muy obvio, pero ¿qué os parece acompañarla con chips de frutas deshidratadas? Están deliciosas.
Quizás estés pensando que falta un aperitivo con el que os hacen los ojos chiribitas, aunque no queráis reconocerlo: las gominolas o chuches. Pero es que van bien con todas las ginebras de sabores. E incluso para los más golosos pueden combinar también con un gin-tonic tradicional.
Para un gin tonic con ginebra tradicional
Y hablando de gin tonics “tradicionales”, pues lo más habitual es acompañarlos con frutos secos o aperitivos salados. Y aquí podemos ir desde las típicas patatas fritas hasta las chips de yuca, cuyo sabor es más suave.
Y aunque no os lo vaya a contar hoy, os quiero adelantar que se están empezando a maridar los gin tonics con comida. Esto quiere decir que te podrás zampar una hamburguesa o un buen pescado acompañados por una copa sin que nadie te diga que no es momento. Pero eso para otro día 😉
¡Muy buenas! ¿Qué tal? Esta semana estoy muy nerviosa deseando que llegue el jueves, ya que me han invitado al evento de Linda Sharkey en Madrid, y tengo muchísimas ganas de ir.
Este jueves 6 de abril se presenta el trunck show #Linda4Perinola, en el que se mostrará en exclusiva la colaboración que ha hecho Linda Sharkey para la marca Perinola HG. Desde las 9:00 hasta las 20:00 se podrá acudir a este espacio en la Calle Guzmán el Bueno 127 para conocer esta nueva colección y pasar un rato divertido.
Por la mañana se podrá disfrutar de un brunch and bubbles y por la tarde llega el mejor momento, los canapés y los gin tonics. Además, ¿sabéis cuál es la marca que va a estar en el evento? ¡Emma Premium Gin! Sí, la ginebra que lleva mi nombre estará presente para degustarla este próximo jueves. Una razón más para no perdérmelo.
Para los que no conozcáis Emma Premium Gin, es una ginebra riquísima en realidad son tres, porque puedes elegir entre tres sabores: fresa, naranja y lima.
¡Nos vemos este jueves!
Sí, antes de llegar a la ciudad ya seguía a algunos ilustradores en las redes sociales y también me compré varios de sus libros. Muchos de ellos envían mensajes positivos como Mr. Wonderful que te ayudan a seguir adelante día a día o también más realistas como Alfonso Casas que reflejan la realidad más dura del amor y otras vivencias.
Tengo que confesar que antes de llegar a la ciudad me pillé todos los libros en los que ha participado Moderna de Pueblo como ilustradora, y es que Raquel Córcoles ha sido mi referente antes de tomar cualquier decisión. Me siento tan identificada con sus ilustraciones que a veces hasta me creo que están hechas para mí.
Las escenas que representa de chicas en sus dibujos me fascinan, porque parece que nos hagan una fotografía a mis amigas a mí mientras tomamos una copa de Emma Premium Gin en casa o vamos al bar a tomar unas copas. Es totalmente nosotras.
“Soy de pueblo: manual para sobrevivir en la ciudad” es un libro de Raquel Córcoles que se ha convertido para mí en una hoja de ruta. Cada vez que dudo en algo, intento tomármelo con humor con sus ilustraciones y fácilmente encuentro la solución.
Una ilustración totalmente distinta pero que me fascina es la de Paula Bonet, sus dibujos son lo más emocional que he visto en mi vida. En mi cuarto tengo una lámina que ella misma me envió (escrita mi dirección de su puño y letra) y que pienso llevarme a tantos pisos como me mude el resto de mi vida. Es simplemente perfecta.
Sara Herranz es otra ilustradora que me gusta mucho, pero más para momento de drama, ya que ella está más enfocada al desamor y a la supervivencia en este tipo de situaciones. Eso sí, sus dibujos en blanco y negro con tonalidades rojas en los labios o las mejillas son realmente inspiradores. Con un estilo propio muy pero que muy personal.
El libro de Lucía Be (que ya ha montado su propia tienda online con diferentes secciones) de “La vida es una verbena” me chifó en su momento, y cada vez que sube una ilustración a las redes sociales me emociona, porque creo que tendría que abrir una cuenta exclusivamente para sus ilustraciones. Me encantan.
Por último, no podía olvidarme de Pedrita Parker, la ilustradora que nos muestra a las mujeres como superheroínas. Y es que en su calendario de 2017 ha representado a algunas de las mujeres más empoderadas del cine. Está muy pero que muy chulo. Os lo recomiendo.